Cuidado con lo que me deseas,
los que me protegen no
duermen ni reposan.
Por genética viene pactado
que lo que me mandes te
será multiplicado.
Por mi sangre corre
el temple de mis
abuelas y ambas daban
un paso al frente con la mirada
alzada. No. Mi herencia no
son tierras pero mis piernas
no tiemblan sobre ella.
¡Cuidado con lo que me deseas!
las que me protegen
me quieren de veras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario