miércoles, 1 de marzo de 2023

EL QUE DE OTROS HABLA MAL, A SÍ MISMO SE CONDENA

      

Hace pocos dias, me saluda una señora alegremente en la calle cuando se cruzaba conmigo.
Digo señora por no decir bruja o mala lengua.
Pasé de largo sin contestar, con una invisibilidad que se merece sin contemplaciones.
Creo muy seguro que se pasa la vida repartiendo tempestades sobre los demás, un plan diabólico del que nunca se desprende, creyéndose que la gente no está al tanto de su necesidad de atención psiquiátrica. Pero su práctica es generalizada. Me da pena.
No hacía muchos más días que dos personas me informaban que esa misma señora les informaba anécdotas muy desagradables en cuanto a mí persona, mentiras y calumnias certificadas para no creerlo.
Hay gente muy extraña en este mundo: critican, calumnian, juzgan, se burlan y desprecian.
Y entonces vuelven a casa y no logran entender porque sus vidas están llenas de frustración, amargura, resentimiento y desilusión.
El que de otros habla mal, a sí mismo se condena
Puede una gota de lodo
sobre un diamante caer;
puede también de este modo
su fulgor oscurecer;
pero aunque el diamante todo
se encuentre de fango lleno,
el valor que lo hace bueno
no perderá ni un instante,
y ha de ser siempre diamante
por más que lo manche el ciento.
Mi Tranquilidad es invaluable ....
Con el tiempo aprendes a frenar la lengua, a no reaccionar cada vez que escuchas o ves algo que no te agrada ....
Entonces aprendes a retirarte a evitar esos lugares o personas que te hacen sentir incómodo y empiezas a proteger tu paz, tú círculo se vuelve cada vez más pequeño, y a su vez más saludable ....
A esto le llamo inteligencia emocional, hay que aprender a elegir las batallas, que no todo el mundo merece tu atención y mucho menos tu compañía ....
Porque la tranquilidad jamás será negociable ..

Lino Saborido.








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