¡ Es duro!. La reincorporación al currelo, el
regreso a la lucha por el pan, el despertador, ir a contrareloj, los nervios,
la ansiedad, las regañinas, las interminables ocho horas diarias, es@s compañer@s, las responsabilidades, la
monotonía...Es duro pero, ¿qué quieres que te diga? Están las risas por
cualquier tontería surgida a la mínima ocasión, las miradas comprensibles de
quien odia como tú el peloteo y l@s pelotas, esos minutos
escasos de descanso y vamos de nuevo al tajo y ,sobre todo, la tremenda
gratificación de ganarte tu sueldo y tu puesto. ¡Vale!. Olvidar todo lo
escrito, lo que hay aquí y ahora es una mujer que acaba de superar el primer
día del año, que llegó a casa rota y entumecida por el frío y que busca
desesperadamente un motivo, causa o justificación para poder seguir un año más
sin volverme loca!!!
Mano
Figueira,2021
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